martes, 27 de enero de 2009

Historia de África.



La historia de África comienza con el surgimiento de los primeros homínidos hace unos cinco millones de años y se extiende hasta nuestros días. El periodo histórico de la Edad Antigua en África incluye la aparición de la civilización egipcia, el posterior desarrollo de las sociedades fuera del valle del Nilo y la interacción entre ellas y las civilizaciones fuera de África. A fines del siglo VII el norte y este de África fueron fuertemente influenciados por la expansión del Islam, propiciando la aparición de nuevas culturas, tales como los pueblos swahili. Esto también incrementó el tráfico árabe de esclavos, mismo que culminaría hasta el siglo XIX. La historia africana precolonial se enfoca en la época que transcurre entre comienzos del siglo XVI, caracterizada por el traslado de grandes cantidades de pobladores africanos en calidad de esclavos al Nuevo Mundo, hasta el inicio de la disputa europea por África. El periodo colonial africano transcurrió desde finales de los años 1800 hasta el advenimiento de los movimientos independentistas en 1951 cuando Libia se convirtió en la primera colonia africana en ganar su independencia. La historia africana moderna ha estado plagada de revoluciones y guerras, contando también, no obstante, con el crecimiento de las economías de algunas naciones africanas a lo largo del continente.
Los viejos prejuicios contra los africanos de raza negra han hecho que hasta hace poco la historia africana fuera narrada o representada de forma marcadamente eurocéntrica o racista. La historia africana ha sido un reto para los investigadores dada la escasez de fuentes escritas en grandes partes del África subsahariana, y también debido a las opiniones contrastantes sobre lo que es y no es africano. Algunas técnicas de estudio como el registro de la historia oral, la arqueología y la genética —para rastrear el movimiento de los pueblos— han sido cruciales a la hora de escribir la historia de varias regiones africanas que en el pasado había sido un misterio.

Un viaje a África.


Si el interés de sus próximas vacaciones está en conocer un lugar que no lo defraudará, probablemente le será muy útil la página www africa com, en donde encontrará un gran compendio de información turística práctica para el que planea visitar algún lugar de este exuberante continente. Datos de hoteles, comercio y guías turísticas.

Hay muchas razones para ir a África. La abundante flora en algunas zonas de Africa, se conjuga con ciudades despampanantes, paisaje que podría interesar a muchos. Otros turistas desearían aprovechar la imagen más generalizada del continente y vivir su aventura de safari en Africa. También, hay quien sólo quiere aventurarse al encuentro con lugares que le vaya proporcionando el camino. En todo caso, sea cual sea la motivación turística, viajar sea a Africa Central o a cualquier otro lugar de este continente, puede ser una experiencia única.

Como en otros continentes, en Africa también se conjugan diferencias y similitudes que, como esencia de una cultura, resultan ser lo más atractivo para el visitante. Seguramente en todos los lugares que alguien visita hay un sinfín de lugares y actividades por conocer. Por ello, la previsión es una buena herramienta para el turista que quiere explorar bastante.

Una buena opción para asegurar unas animadas vacaciones puede ser conocer un poco más del país o del continente que se piensa visitar, si se trata de un tour a largo plazo. Rentar unos cuantos videos de Africa podría dar ideas para aprovechar mejor el paso por aquellas tierras, ya que las vacaciones suelen ser tan cortas.

Africa, continente que se revelará como potencia en el mediano plazo .

Frente a los fenómenos de la globalización y el enorme crecimiento de algunas regiones del mundo, la diplomacia mexicana apuesta por la diversificación y apenas llega a tiempo a regiones que estuvieron por años olvidadas, como África.

A pesar de sus más de 11 millones y medio de kilómetros cuadrados y casi mil millones de habitantes, el llamado Continente Negro ofrece enormes oportunidades a México en diversos renglones como la construcción, la industria energética y la alimenticia.

Las naciones de esa parte del mundo crecen a ritmos de cinco y seis por ciento en promedio anual, mientras que en casos extraordinarios, como Angola, la cifra se calcula en 22 por ciento.

Como muestra de ese avance, el gasto que realizan en infraestructura las naciones en su conjunto asciende a dos mil millones de dólares al año.

Con un conglomerado de 53 países, que concentran un 14 por ciento de la población mundial y 28 por ciento de los votos en la Organización de las Naciones Unidas (ONU), esa región del mundo empieza a ser importante para casi todas las naciones.

Como ejemplo de ello, China, India, Japón, Brasil, Estados Unidos, Corea, Argentina e incluso Cuba tienen importantes intereses en los países africanos.

En particular, China desarrolla grandes proyectos de construcción en varios países, mientras Brasil tiene embajadas en 30 naciones y Cuba en las 53 de ese continente, incluso de la isla operan de manera permanente una red de dos mil médicos en Africa.

Tan sólo a mediados de la presente década, la inversión estadunidense en el continente alcanzaba los dos mil 925 millones de dólares, sobre todo en las industrias extractivas y energéticas.

Ana Luisa Fajer, directora para Africa y Medio Oriente de la cancillería, sostuvo en entrevista con Notimex que en los últimos meses el gobierno mexicano ha aplicado una estrategia para recuperar los espacios que por falta de presupuesto se perdieron.

Hace algunos años este país respaldó decisivamente los procesos de independencia de los países africanos, que ocurrieron alrededor de los años 60, y posteriormente tuvo una intensa relación con muchas naciones de la zona.
dos... zona

Incluso, añadió, México llegó a tener una red de 12 embajadas, que hoy día se han reducido a seis, además de algunos consulados honorarios, con los que se cubre aproximadamente 60 por ciento del territorio africano.

En la actualidad existen embajadas mexicanas en Argelia, Egipto, Etiopía, Kenia, Marruecos y Sudáfrica. Este último país, por cierto, es el gigante del continente y concentra 30 por ciento del Producto Interno Bruto de la Región.

Mientr
as tanto, Angola, Argelia, Costa de Marfil, Egipto, Libia, Marruecos, Nigeria, Sudáfrica y la República Arabe de Saharaui (mejor conocida como Sahara Occidental) cuentan con embajadas en México.

México abrirá próximamente embajadas en Angola y Nigeria, con lo cual se espera ampliar las posibilidades de negocios en ese continente.

De hecho, comentó, actualmente el sector alimenticio representa una importante oportunidad. Hay proyectos muy ambiciosos con el nopal, que se encuentra en toda Africa y que hasta hace poco tiempo no se consideraba comestible.

En cuanto a iniciativas de empresas mexicanas en esa parte del mundo, refirió que Maseca tiene un importante proyecto de expansión, mientras Gutsa explora un desarrollo de gran envergadura en infraestructura.


En materia de salud (Sida y malaria), agricultura, desertificación, combate a la pobreza (a muchos países les interesa el Programa Oportunidades) y educación y cultura, donde lo importante es que las becas que otorga México se aprovechen bien.

La quinta estrategia es la referente a comercio e inversión, rubros donde lo más importante es conocer los países, la cultura, las costumbres y la religión, para hacer las inversiones correctas y en los que puede participar ProMéxico.

La sexta consiste en incrementar los espacios de diálogo político, y la última, en hacer ver a los mexicanos que más allá del retraso, rezago y la marginación, en Africa existen oportunidades importantes en diversas materias.

De hecho la integración de la Unión Africana, organismo en que México es observador desde 2005, es un paso importante para que en el mediano plazo el continente ocupe un lugar destacado en el concierto internacional.

Entre los pocos embajadores africanos en México existe el consenso de que este país se ha acercado con seriedad y decisión a su continente, aunque hay algunos matices entre ellos.

Para Anne Gnahouret, embajadora de Costa de Marfil en México, la reciprocidad constituye una enorme asignatura pendiente que este país debe cubrir, pues su país instaló embajada aquí desde 2003 y México aún no hace lo propio.

En tanto, para el representante diplomático de Argelia, Merzak Belhineur, país donde México ya tiene embajada, la reciprocidad es un tema resuelto.


Considera que lo importante es que México realiza un esfuerzo serio para que África sea conocida y reconocida, con sus fortalezas y debilidades, pero en forma realista por los mexicanos.

En conferencia de prensa, reconoció que el gobierno mexicano realiza una labor importante, pues antes había una presencia menor, modesta, de este país en aquel continente, mientras que ahora se observa una actitud responsable para mejorar esa situación.

Etnias africanas.




Lenguas
Se hablan más de mil lenguas en África. Aunque más de 50 superan los 500.000 parlantes cada una, relativamente pocas personas hablan la mayoría de estas lenguas. Además del árabe, las más habladas son el swahili y el hausa. Las principales familias o grupos lingüísticos son: el congo-kordofaniano y el nilo-sahariano, los dos grupos más amplios con más de 160 millones de hablantes cada uno; el hamito-semítico, o afro-asiático, que se concentra en el norte y noroeste de África; y el de las leguas khoisán, que hablan los san y khoikhoi de África del Sur. Muchos africanos, en especial aquellos del África subsahariana, son bilingües: hablan su idioma nativo al igual que el que llevaron los primeros gobiernos coloniales europeos.

Religión
El cristianismo, la religión más difundida, fue introducido en África del Norte en el siglo I y se extendió al Sudán y las regiones etíopes en el siglo IV. El cristianismo sobrevivió en Etiopía, pero en otras zonas fue sustituido por el islam. Fue reintroducido y se extendió por el África tropical con el desarrollo de la expansión europea en ultramar a partir del siglo XV. Hoy, los grupos protestantes y católicos están representados por igual en todo el continente.
El islam, la segunda religión más difundida de África, fue introducido en todo el norte de África en el siglo VII y durante los siglos siguientes se extendió por la costa oriental y las praderas del África occidental. A lo largo del siglo XX el islam se introdujo en las restantes zonas del continente.
Cerca del 15% de los pueblos africanos practican religiones animistas o locales. Aunque existe una gran variedad, tienden a tener un único dios o creador y varios espíritus subordinados -espíritus de la naturaleza que habitan en los árboles, el agua, los animales y cualquier otro elemento o fenómeno natural- y espíritus ancestrales, como los fundadores de la familia, el linaje o el clan -que influyen en la vida diaria. Ciertos movimientos religiosos animistas mezclan ritos ortodoxos cristianos con creencias religiosas tribales. Guiados por sus propios profetas, estos grupos se han extendido por toda África, aunque parecen más difundidos y poderosos en África central y África del Sur.
Existen pequeñas comunidades judías en el norte y en el sur de África, y los cultos hindúes, budistas y taoístas están extendidos por África oriental y meridional.

Cultura
Gran parte de la actividad cultural africana se centra en la familia y el grupo étnico. Arte, música y literatura oral sirven para reforzar las estructuras religiosas y sociales existentes. La minoría occidentalizada, bajo la influencia de la cultura europea y el cristianismo, rechazó en principio la cultura tradicional africana, pero con el auge del nacionalismo africano ha tenido lugar un resurgimiento cultural. Los gobiernos de la mayoría de las naciones africanas subvencionan compañías nacionales de danza y música, museos y, en menor grado, a artistas y escritores.